Los animales con mucho pelaje, como los perros o los gatos, necesitan de un cepillado continuo para que este esté saludable y brillante. Cepillar a un gato puede parecer algo complicado, pero, con algunos consejos, la tarea se podrá hacer de forma más sencilla.
¿Por qué cepillar a un gato?
Cepillar el pelaje gatuno aporta beneficios al felino. No solo estéticos, sino también para que su salud no se vea perjudicada. A continuación, se explican los motivos.
Bolas de pelo
En el caso de razas de gatos que tengan mucho pelo, es importante cepillarlos con frecuencia. Con esta acción, lo que se consigue es que no tengan bolas de pelo en el estómago. Al eliminar el pelo muerto, se va a evitar que se lo traguen mientras se limpian con la lengua.
Fomenta la exploración
Estar al tanto de cualquier cambio en la piel también es una de las razones para cepillar a esta mascota. ¿Por qué? Porque, así, se podrá ver si al felino le sale algún bulto o tiene algún tipo de problema que, a simple vista, quizás no se percibe.
En este caso, también se podrá observar si tiene algún tipo de parásito, como pulgas o garrapatas.
Mejorar la circulación sanguínea
Al cepillar de forma regular al felino, también se consigue estimular la circulación. Es ideal para gatos que no tengan mucho movimiento o suelan estar en la misma posición durante mucho tiempo.
¿Qué cepillo elegir?
Para escoger el mejor cepillo para gatos, lo primero que hay que analizar es la clase de pelo del animal. Dependiendo de esto, habrá que elegir entre:
- Cepillo para pelo corto.
- Cepillo para pelo largo.
- Guantes de cepillado.
¿Cómo cepillar correctamente a un felino?
Los consejos nunca vienen mal. A veces puede parecer complicado si el gato opone resistencia, pero, siguiendo estos pasos, el proceso será más sencillo.
- Para empezar a cepillarlo, lo más importante es intentar tranquilizar al felino. Conviene empezar de forma delicada para que el movimiento no le resulte molesto.
- Lo mejor son ir acariciándolo y, cada pocos minutos, darle un premio si se ve que está muy incómodo.
- Las zonas en las que más hay que centrarse son: la barriga, la cola y las orejas. Pero estas habrá que cepillarlas después de estar un rato en el torso, que es donde menos les molesta esta acción.
- Para que esto funcione y se aprovechen los beneficios, interesa llevar a cabo este proceso un mínimo de una vez al día. Aunque lo ideal sería hacerlo dos por lo menos.
- En el caso de las patas, interesa tener cuidado, dado que se trata de una de las zonas que más les molestan. Se puede aprovechar para mirar las uñas y los dedos con mucho cuidado.
Como se ha podido ver, cepillar a un gato puede ser sencillo si se sabe cómo hacerlo. Si quieres conocer más información sobre cepillos y otros temas relacionados, te recomendamos seguirnos en nuestras redes sociales. Si tienes alguna duda, no te lo pienses y contacta con nosotros para que podamos resolverla.